Allende, Isabel
Plaza y Janés
En mis cuaranta años, yo, Zarité Sedella, he tenido mejor suerte que otras esclavas. Voy a vivir largamente y mi vejez será contenta porque mi estrella - mi z'etoile - brilla también cuando la noche está nublada. Conozco el gusto de estar el hombre escogido por mi corazón cuando sus manos grandes me despiertan la piel. He tenido cuantro hijos y un nieto, y los que están vivos son libres.